Animación en la tercera jornada de Curt Creixent
En el último día se ha realizado una masterclass sobre coproducción de cortometrajes en el ámbito de la animación y a continuación ha tenido lugar un encuentro one-to-one entre productoras y cineastas.
Ismael Juárez – València, 29 de junio 2022
En la última jornada de la octava edición de Curt Creixent la animación ha tomado protagonismo. Más concretamente en lo que se refiere a la coproducción para realizar cortometrajes. A las diez y media de la mañana del miércoles 29 de junio dio comienzo una masterclass en la que distintas productoras con una trayectoria destacada en el ámbito de la animación explicaron algunas de sus experiencias coproduciendo en el formato corto y desarrollando reflexiones sobre este tema.
El encuentro fue moderado por la docente e investigadora Sara Álvarez, y contó con la presencia de Chelo Loureiro (Abano Producións); Ramón Alós (Bígaro Films); e Iván Miñambres (Uniko Studio).
La sesión ha comenzado con una pequeña introducción de cada miembro de la mesa donde Chelo Loureiro ha querido remarcar que la principal diferencia entre la ficción y la animación está en el desarrollo. “La ficción se puede hacer con poco dinero. En un proyecto de animación todo es distinto. En la animación no existe lo de trabajar gratis y los costes se disparan, ya que además el proceso dura mucho más. Y no queda más remedio que coproducir.”
Tal es así que todos han estado de acuerdo que mientras las experiencias para coproducir cortometrajes de ficción son raras o escasas, en animación es algo “inevitable”, según Sara Álvarez, y debido también a que las televisiones no financian cortometrajes, Loureiro ha asegurado que no queda más remedio que salir a los mercados “a buscar productores”, teniendo en cuenta que habrá que negociar con ellos ya que, según el territorio en que se ubiquen tendrán su propia “pata creativa”, sus propias condiciones establecidas para conseguir ayudas y financiación. Por ello, al salir a buscar socios para coproducir hay que dejar “puestos abiertos y negociar”.
Ramón Alós estuvo de acuerdo en que “lo ideal es que la estructura creativa no esté cerrada.” Pero él cree que esto debe ser así no solo por una cuestión estratégica para las ayudas. “Como productor también es interesante que haya un intercambio creativo. Es lo ideal.” En ese sentido, ha querido también indicar que el productor “tiene un pie en el aspecto creativo y debe dar su visión aunque prevalezca la del director”.
Iván Miñambres afirmó que “la producción ejecutiva es creativa desde el momento que eliges un proyecto. El productor debe tener una parte creativa. Pero para mí no es un conflicto. Nunca he tenido conflicto con directores. Hay muchas decisiones que son creativas, que son complementarias, y que son fundamentales para la parte creativa. No podría levantar un proyecto solo desde el punto de vista financiero si no estuviera de acuerdo con la raíz creativa.”
Loureiro ha llevado la charla de nuevo al terreno de las “conversaciones entre productoras que quieren coproducir” y ha afirmado que “las coproducciones son fantásticas porque aprendemos muchísimo. Pero también se puede sufrir muchísimo si hay falta de entendimiento”. De ahí que, según ella, sea tan importante saber elegir con quién se quiere coproducir. Por otra parte para la productora gallega en el diálogo entre productores y directores hay una gran diferencia cuando estos últimos son noveles o con una trayectoria consolidada. Según ella, los noveles muchas veces “quieren demostrar cosas”, no tienen en cuenta el tiempo, “que vale dinero”, y son más reacios a plantearse a “usar la tijera”. En ese sentido quiso remarcar que “no hay ningún técnico en el cine que no sea creativo. Todo el mundo tiene una parte de creador en el proceso, también los productores.”
Volviendo al terreno de la coproducción, Loreiro ha señalado que en España no hay ayudas al desarrollo de los cortometrajes, además de que hay hándicaps importantes, “por ejemplo en Galicia no tengo ayudas si no tengo un 20% de coproducción”. Todo ello hace que las productoras de animación se encuentren en muchas ocasiones “en fuera de juego”.
Ramón Alós destacó que “en España estamos dependiendo de financiación pública. Estamos a rebufo de los tiempos y condiciones que marca la administración.” Algo que complica las cosas por que “cada productor tenemos tiempos distintos y condiciones distintas según las administraciones.”
Miñambres ha ido más allá al hablar de coproducir con otros países, más en concreto con Francia. “Hay que saber cómo se puede equilibrar la asociación, cómo negociar esa relación, para que no haya desequilibrio. Es lo más complejo. Por ejemplo, Francia tiene muchas fuentes de financiación, algo que puede ser bueno, pero luego eso te puede limitar a ti para conseguir dinero”. ¿De qué forma? Chelo Loureiro lo ha explicado a continuación: “Una cosa vale cien y nosotros podemos levantar el ochenta por ciento. Entonces, vamos afuera a buscar el veinte por ciento y te encuentras que si vas a Francia y dices ‘necesito este veinte por ciento’, te dicen ‘vale’. Pero ese veinte por ciento en lugar de valer veinte, en Francia vale cuarenta, con lo cual el coste en vez de ser cien pasa a ser ciento veinte. Ellos ponen cuarenta haciendo solo el veinte por ciento del trabajo, y tu participación de ochenta se ha quedado reducida a un sesenta y seis por ciento. Imaginaos si necesitas más. Entonces pasan a ser mayoritarios de un proyecto que tú has levantado y además haces más trabajo que ellos.”.
Todos asentían. Ramón Alós añadió: “Hay que pelear”. Y Chelo Loureiro fue más allá: “Los franceses no nos necesitan. Buscan el talento, que en España hay mucho. No me gusta estropear el cuento a la gente más joven, pero hay que tener mucho cuidado con el presupuesto, que no se queden con el proyecto.” Y añadió que al coproducir “hay que dividir por trabajo, no por presupuesto, porque en Francia todo vale más”.
Más adelante, una persona del público donde hubo numerosas cuestiones en relación a la producción de cortos de animación en distintos ámbitos, afirmó que la forma en que la mesa estaba hablando sobre Francia es la misma que en Latinoamérica se podría hablar de España. A lo que Miñambres ha contestado que “en España deberíamos tener la misma honestidad con Latinoamérica que le pedimos a Francia”.
Encuentros one-to-one
Tras la mesa en torno a la coproducción han tenido lugar los encuentros one-to-one entre cineastas y productoras de animación presentes en Curt Creixent. Encuentros que, como en el día anterior, han obedecido a una dinámica cronometrada de cuatro minutos en diferentes rondas.
Las personas procedentes de las distintas productoras han sido: Chelo Loureiro (Abano Producións); Iván Miñambres (Uniko Studio); Ramón Alós (Bígaro Films); Iñaki Sánchez Arrieta (El Camino PC SL); Raúl Riebenbauer (El señor Bauer); Claudia Faubel (La penúltima Films); Lucas Moro y Manuel Rossel (Video Al Cuadrado); y Andrés Corbera (Miracor Films).